Mónica Moctezuma Valenzuela

Universidad de Sonora / a219214957@unison.mx

Desde el inicio del boom coreano, algo se ha vuelto tan viral como el kpop y los kdramas: el cuidado de la piel o skincare resulta prioritario para personas de todas las edades en nuestro país.
Pero seamos sinceras, el cuidado de nuestra piel viene desde nuestras abuelas, las cuales siempre encontraban una manera de lucir radiantes día a día, desde usar leche de burra para aclarar y poner la piel sedosa, hasta el uso del aloe vera para ayudar a la cicatrización, algo que ellas aprendieron de sus madres y mujeres de su entorno. Los remedios caseros son algo que sin lugar a dudas se seguirá practicando mientras haya tradición oral y oídos que escuchen estos saberes.
El cambio más notable entre el cuidado de la piel de nuestras abuelas y el actual es la cantidad de productos que se utilizan, cada uno con un propósito diferente y para pieles diferentes. Además de tener una piel sana, el objetivo del cuidado con los pasos coreanos es tener lo que se llama glass skin o piel de porcelana, esto significa no tener imperfecciones, texturas o poros abiertos. Otro gran cambio es el uso del protector solar de manera casi religiosa, pues la recomendación de los dermatólogos es reaplicar el producto cada cuatro horas.
Ahora bien, hablando de dermatólogos, según las cifras que se obtuvieron gracias al beauty report que realiza la marca L’Oreal, sólo 12% de las personas que utilizan productos para el cuidado de la piel acuden a un profesional para obtener un tratamiento especializado. Esto es alarmante puesto que hay algunos activos, como el retinol, que pueden dañar pieles sensibles, por lo que es recomendable tener la opinión de un experto antes de brincar en el tren de las tendencias de belleza.
A lo largo del tiempo, los estándares de perfección han cambiado conforme a la sociedad y su cultura. Como mencioné al inicio, la creciente influencia oriental que experimentamos durante los últimos años hacen que el skincare sea una tendencia que llegó para quedarse.
Esto es algo que puede impactar el aspecto psicológico tanto de manera positiva como negativa. Aunque es cierto que cuidar de sí misma ayuda en trastornos como depresión y ansiedad, la presión por verse de determinada forma puede perjudicar la autoestima de las personas.

Referencia
López Hernández, N. (2022). “Ocho de cada 10 mexicanas usan productos para la piel; solo 12% va al dermatólogo”. Forbes México. https://www.forbes.com.mx/ocho-de-cada-10-mexicanas-utiliza-productos-para-la-piel-solo-12-visita-al-dermatologo/

Título: Mascarilla.

Fuente: https://www.publicdomainpictures.net/es/free-download.php?image=mascarilla&id=356235

Infografía: Esmeralda Jauregui Vargas.